de vuelta al arroz
me trajo esta ruptura
de vuelta a los techos
a la soledad acompañada
de espectros, dioses, fantasmas
aquí arriba
no son la tierra
y sus rincones
las sombras humedades y raíces
los bichos y perros vagos
mis aliados
o senderos
a ellos
mis queridos
doy la espalda
mi cabeza y cuello se tornan
buscando oír al cielo
mis ojos como un faro
buscando en aquellos mares levitantes
el resplandor de náugragos espíritus
mientras mi piel y arapos
escudriñan el decir del viento
abajo miro
siento ajeno el paisaje
un acumular de desastres
el clamor de los árboles
la locura de los perros
y entremedio
la libertad ambigua
de gatos y poetas
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